Nunca tuvo un pelo de tonto, aunque hace 42 años esa cabeza de notario de provincias albergaba una cabellera. Su expresión ha cambiado poco, así como su apetito y sus modales en la mesa. Por eso será para todos muy fácil reconocerlo: se trata de ese gordito cuáquer que vivía a un costado del Colegio, es decir a unos 20 0 25 metros de la entrada del plantel, pero que en el colmo de la conchudez llegaba siempre tarde y con un sánguche grasiento en la mano. Si, claro, se trata de Víctor Sánchez Tenorio, joyita del Deustua.
martes, 27 de abril de 2010
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Quiero rotundamente desmentir la falaz especie de que yo haya puesto a Benavides la chapa de 'Frente de mula', no sé quién la inventó, sospecho que Yerén, pero no puedo asegurarlo.
ResponderEliminarLa única chapa que recuerdo haber puesto es la de 'Judio' a mi buen amigo Pedreschi, chapa sin mucho ingenio pero que por esas cosas del destino pegó, llegando a ser conocido con dicho mote hasta en su barrio Chama.
Saludos
Y coleccionista empedernido de munecas Barbie!
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